Hay días que simplemente son Demasiado.

Cuando pensamos en la palabra "Demasiado" lo primero que se nos viene a la mente es abundancia, grandeza, excelencia o simplemente algo que no puede ser descrito de una forma en concreto. Sin embargo, cuando yo pienso en Demasiado, pienso en una marca que está revolucionando la forma de vestir de las caraqueñas y que promete grandes cosas para el día a día de la mujer venezolana. El mes pasado tuve la oportunidad de conocer en persona a quienes dirigen la marca y pude compartir con ellas una tarde maravillosa llena de pensamientos positivos y alegría. Aunque no lo crean, esa tarde salí con una sonrisa de oreja a oreja y me enamoré de todas y cada una de sus piezas. Aunque  esa tarde solo compre el Kimono que verán en las fotos, estoy segura que iré por más de sus piezas. Pero hoy me gustaría compartir con ustedes un poco de lo que es Demasiado. 

Demasiado era un sueño familiar que nació gracias a la pasión que tenían las diseñadoras por las telas y la historia que los textiles tenían en sus vidas, pero no fue sino hasta septiembre del año 2013 que este sueño se hizo realidad. Gracias a los conocimientos adquiridos durante su infancia, las chicas de Demasiado aprendieron de su madre detalles básicos que las ayudarían a diferenciar los tipos de telas, conociendo todos y cada uno de sus componentes. Entre bordados, encajes, sedas, hilos y agujas, los conocimientos se hicieron práctica cuando sus diseñadoras se animaron a darle vida a sus ideas. 

Estas ideas no tenían límite, puesto que quienes ideaban lo que sería la marca no querían abarcar un solo mercado. Para ellas la marca debía ser un bazar que presentara lo que cualquiera necesitara o buscara para su día a día. Cosas para el hogar, ropa, accesorios o zapatos sería lo que atraería a muchas personas. Sus piezas tampoco tendrían un límite, ya que están dirigidas a un estilo de vida cotidiano en el que pueden ser usadas para ir al cine, para pasar una tarde con tus amigas, para reuniones e incluso para actividades al aire libre como ir a la playa o a una tarde de jardines. Todo esto está inspirado por la individualidad de las personas. Lo que hace que la marca sea de por sí una línea de excelencia y particularidad. Como dicen sus diseñadoras: "Nos esmeramos por marcar la diferencia en cada pieza, lo cual hace que cada producto que sale del taller de Demasiado sea único". 

En lo personal, una de las cosas que más gusta de la marca es lo que transmite. Usar una prenda Demasiado no es solo vestirla, sino que muestra la individualidad de la persona, la esencia de quién eres. Además, una prenda Demasiado emana aquello que da alegría a través de sus colores y texturas, y te conecta con el entorno. Usar una prenda Demasiado es simplemente demasiado. Esto nos lleva a otro aspecto interesante de la marca, su sello. Nos cometaron sus diseñadoras que el pavo real fue la mejor opción para describir gráficamente lo que sería Demasiado ya que en cualquiera de sus formas es un animal impactante y sorprendente. "Es un animal que cuando abre sus plumas te hace ver la magnificencia de la naturaleza, la elegancia y la feminidad", así describieron sus diseñadoras la imagen de la marca. 

Demasiado apenas está comenzando y, a mí parecer, aún les falta demasiado para que la marca se acabe  ya que sus diseñadoras son emprendedoras capaces de crear y crear sin nunca parar con el fin de llevar su marca más allá de las fronteras caraqueñas e incluso venezolanas. 

Sé a ciencia cierta que cuando la constancia y dedicación se unen con la pasión lo imposible se hace posible y Demasiado ya lo está haciendo, porque más que un estilo de vida, Demasiado es demasiado.

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