Aprendizajes de mi viaje a un estilo de vida más responsable y sostenible - What I have learned on my journey to a more responsible and sustainable lifestyle



Entender que todos somos parte de este mundo y que no podemos desconectarnos de la naturaleza es reconocer que cada una de nuestras acciones tiene un impacto en nuestro entorno. Desde hace ya muchos años, los científicos han advertido y anunciado el cambio en las temperaturas del planeta haciendo énfasis en sus repercusiones sociales, económicas y ambientales. Por eso cuando somos conscientes de esos impactos y decidimos actuar contra esta problemática ambiental, comenzamos un viaje hacia un estilo de vida más responsable y sostenible.

A pesar de ver con interés la temática ambiental desde pequeña, no fue sino hasta hace cuatro años cuando decidí conectar lo que sentía con lo que hacía. Sabía que debía ser responsable de mis acciones y hacer un cambio humano. Durante este viaje de transición, el cual nunca acaba, entendí que:

Es una experiencia personal, no existe un patrón igual para cada persona, ni una interpretación única del viaje. Cada uno de nosotros debe hacer esta transición de forma individual para conectar y entender el viaje. No es una competencia de quién lo hace más rápido o mejor, no debemos compararnos, este es un proceso único que va a ritmos diferentes dependiendo de la persona.

Es una colección de pequeños pasos donde el cambio sucede de forma gradual. No existe un cambio instantáneo, ni mucho menos perfecto. Hay errores y ensayos, descubrimientos, alternativas diferentes dependiendo del contexto y cada paso sigue el ritmo de la persona. Incluso por más pequeños que sean los pasos, son importantes y necesarios.

Es un cambio que sucede desde el entendimiento, enfocado en la interpretación y análisis de cada paso que damos. Conociendo el por qué lo hacemos, cómo lo hacemos y qué importancia tiene hacerlo. No es un cambio al azar, ni mucho menos influenciado por una tendencia, es un cambio que se hace desde adentro, que conecta la mente con el corazón y que impulsa un crecimiento personal de madurez hacia la responsabilidad, la empatia y la honestidad.

Comienzas a valorar la simplicidad y encuentras placer en los pequeños detalles. Entiendes que no se trata de tener más o mejores cosas, sino de vivir en armonía con lo que ya existe. Comienzas a consumir tiempo de calidad y a compartir más con tu entorno y la gente que te rodea, disfrutas de los cinco sentidos en su máxima expresión y empiezas a descubrir lo que es la felicidad para ti.

Creces y descubres nuevas facetas, esas que no sabías que podías tenerlas. Cocinas, coses, siembras, escuchas, observas y sientes. Vas nutriendo tu vida con nuevas experiencias y aprendizajes. Te desafías, te vuelves más útil y capaz y transformas no solo tu forma de vivir, sino también tu forma de ser.

Conectas con tu entorno y allí descubres cómo y dónde hacer el siguiente cambio. Ingresas nuevamente al círculo de la vida planetaria, formas parte del equilibrio, coexistes y convives con la biodiversidad y los elementos. Abres tus ojos a un mundo nuevo y reintegras viejas costumbres y tradiciones.

Cada parte del viaje nos lleva realmente a redescubrirnos para conectar con nuestra verdadera esencia. No es una guía de perfecciones, ni mucho menos una competencia, es una travesía necesaria para establecer un equilibrio con nuestro planeta. Es un proceso que nos invita a vivir en conjunto con la naturaleza y no en contra de ella. 

Porque más que un estilo de vida, es un viaje maravilloso.


Understanding that we are all part of this world and that we cannot disconnect from nature is to recognize that each of our actions has an impact on our environment. For many years now, scientists have warned and announced the change in the planet's temperatures, emphasizing its social, economic and environmental repercussions. So when we are aware of these impacts and we decide to act against this environmental problem, we begin a journey towards a more responsible and sustainable lifestyle.

Despite seeing environmental issues with interest from a young age, it was not until four years ago that I decided to connect what I felt with what I was doing. I knew that I should be responsible for my actions and make human change. During this transition journey, which never ends, I understood that:

It is a personal experience, there is no equal pattern for each person, nor a unique interpretation of the trip. Each of us must make this transition individually to connect and understand the journey. It is not a competition of who does it faster or better, we should not compare ourselves, this is a unique process that goes at different rates depending on the person.

It is a collection of small steps where change happens gradually. There is no instant change, much less perfect. There are errors and trials, discoveries, different alternatives depending on the context and each step follows the rhythm of the person. Even as small as the steps are, they are important and necessary.

It is a change that happens from the understanding, focused on the interpretation and analysis of each step we take. Knowing why we do it, how we do it and how important it is to do it. It is not a random change, much less influenced by a trend, it is a change that is made from the inside, that connects the mind with the heart and that drives a personal growth of maturity towards responsibility, empathy and honesty.

You start to value simplicity and find pleasure in the little details. You understand that it is not about having more or better things, but living in harmony with what already exists. You start to consume quality time and share more with your environment and the people around you, you reach the five senses and you begin to discover what happiness is for you.

You grow and discover new facets, those that you didn't know you could have. You cook, sew, plant, listen, watch and feel. You are nurturing your life with new experiences and learnings. You challenge yourself, you become more useful and capable and you transform not only your way of living, but also your way of being.

You connect with your environment and there you discover how and where to make the next change. You are part of the planetary circle again, you are part of the balance, you coexist and live with the biodiversity and the elements. You open your eyes to a new world and reintegrate old customs and traditions.

Each part of the journey really leads us to rediscover ourselves to connect with our true essence. It is not a guide to perfections, much less a competition, it is a necessary journey to establish a balance with our planet. It is a process that invites us to live together with nature and not against it.

Because more than a lifestyle, it is a wonderful trip.



Comentarios

Entradas populares